LOS GÜEYES BICENTENARIOS

Algún día de esta semana se fue la luz en la mitad de la Condesa y el tránsito se convirtió en un verdadero embotellamiento, y no del bueno, de esos donde uno se atasca con merlot, margaritas o martinis.

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El caso es que venía saliendo del Curves y por la falta de semáforos me quedé varada como ballena de Green Peace en un crucero de Ámsterdam. Unos oficinistas estaban comiendo bicitacos y platicando entre ellos en actitud zen, sin darse la menor cuenta de nada a su alrededor, ni siquiera de que yo estaba a un metro y medio de ellos y tenía la ventana abierta del coche... en fin... su plática iba más o menos así...

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-Güey 1: ...No güey y entonces güey que me quedo pasmado güey así como congelado güey y entonces güey caminé hacia la copiadora güey y yo como si nada güey, pero me cae güey que estuvo bien cañón güey, yo no se de dónde saqué fuerzas güey...

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-Güey 2: Esta grueso güey, ¿y luego que hiciste güey?

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-Güey 1: Pues que me porto así como si nada güey, agarró mis copias güey y me fui de regreso a mi lugar güey pero todo así güey, (actuando como pavo real) tu me entiendes ¿no güey?

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-Güey 2: Uta güey, yo no sé que hubiera hecho si a mi me hubiera pasado güey, esta súper cañón güey, me cae que, que sorpresa güey, yo jamás me lo hubiera imaginado güey, que fuerte güey...

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-Güey 1: Si güey, está bien cañón güey, yo no se lo desearía ni a mi peor enemigo güey, bueno tal vez al pendejo de Gonzalo por imbécil güey, pero de ahí en fuera güey, a nadie güey, se siente de la re chingada güey

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-Güey 2: Me imagino güey, a mi nunca me ha pasado güey y no quiero (tocando madera en el árbol donde estaba recargado) nomás de imaginarlo güey, ni madres güey

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-Güey 1: y eso no es todo güey, para acabarla de chingar güey, que paso frente a la oficina de Saúl güey y que me dice que él también se enteró güey y que está cabrón güey, que no sabe como le hago para actuar como si nada güey, y yo pensé ¿y a ese pendejo que? Ni somos amigos güey, pero que buen pex de que se dio cuenta güey y que me lo dijo ¿no güey?

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-Güey 2: La neta si güey, te digo güey que tú estás bien cabrón güey, eres mi héroe güey, la neta güey

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-Güey 1: Gracias güey, pero sigo sacado de onda güey, me cae que pinche suerte güey, ¿porque a mi güey? Yo soy a toda madre güey, porqué la pinche mala suerte no se va a joder a alguien más como a al puta de Cecilia güey, o a gente así güey como a Obama güey o a Calderón güey, esos si que hay que joderlos güey pero ¿por qué a mi güey?

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-Güey 2: Bueno güey es que tu si estás bien cabrón güey.

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Yo la verdad estaba tan entrada en la plática, que me sentía uno de ellos y ya empezaba a sentir compasión por el güey 1, incluso estuve tentada en pedirle al bicitaco dos de frijol y uno de papa con chorizo para acompañarlos.

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Entonces viene caminando hacia ellos un tipo de traje azul de poliéster y corbata de pingüinos y se unió inmediatamente a la plática.

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-Güey 3: ¿Qué onda güey? Me dijeron que algo pasó güey pero no me contaron bien güey ¿que pex güey?

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-Güey 1: Estuvo cabrón güey resulta que en la mañana cuando llegué a la oficina güey...

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Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiit Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiit claxonazo para que me mueva. Ni siquiera me di cuenta de cuando se fueron los 107 coches que estaban enfrente de mí y por más que comencé a avanzar despacio, no hubo manera de poder quedarme más tiempo y escuchar, de pronto sentí otra vez como todo el universo estaba conspirando contra mí para que avanzara y no me metiera más en lo que no me importa, aunque ya en este punto, seguro que si me importaba...

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Mis conclusiones:

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a) Al güey 1 le bajó la regla y estaba en shock por que Dios les prometió, desde el tiempo de Adán, que eso jamás les pasaría, solo a las mujeres por traicioneras y golfas. El güey 2 estaba muy asustado porque evidentemente si le pasa a uno, al rato le puede pasar a cualquiera, incluso a él y eso si ¡está cañón güey!

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b) Tiene algo que ver con el bicentenario, porque ahora TODO tiene que ver con el bicentenario, hay pizzas bicentenarias, traslado de cadáveres bicentenarios, libros gratuitos bicentenarios, fuentes bicentenarias, canción del bicentenario (muy mala por cierto), Miss Universo bicentenario y por ahí hasta comida corrida bicentenaria, ¿por qué no habría güeyes bicentenarios?

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Mantra: No debo poner atención a conversaciones ajenas a menos que pueda oír el final, no debo poner atención en conversaciones ajenas a menos que pueda oír el final...